Claves para Organizar los Muebles y Mejorar tus Espacios

Ahora con el cambio de temporada, puede ser un buen momento para hacer ligeros cambios en la distribución de los muebles en nuestros espacios para que la armonía resalte. Descubre algunas ideas para organizar los muebles para que el espacio luzca mejor. 

Los espacios residenciales no sólo deben ser visualmente atractivos, sino que además deben sentirse acogedores, armoniosos y principalmente acogedores. Los muebles son un factor clave para conseguirlo. Los siguientes principios de diseño te serán útiles tanto si buscas reorganizar el mobiliario para una renovación rápida como para una decoración desde cero. 

Atención a las proporciones

Antes de tomar cualquier decisión de diseño, observar y medir el espacio en el cuál se está trabajando será el primer paso. Conocer la forma, ancho y largo de una habitación es esencial para poder elegir el mobiliario adecuado según su tamaño. 

La colocación adecuada de los muebles y mantener un equilibrio entre sus dimensiones, el tamaño de la habitación y cualquier elemento arquitectónico es cómo se obtiene una armonía perfecta. 

Crear zonas de conversación

Después de la pandemia por COVID que azotó el mundo y obligó al aislamiento, ahora los espacios deben provocar que haya una interacción cercana. Por lo tanto, los muebles bien diseñados pueden crear un ambiente ideal para la conversación al promover la proximidad, la comodidad y una sensación de unión. 

Derivado de los límites de la audición humana y los problemas relacionados con las interacciones sociales, los muebles deben ser colocados, por lo general, a una distancia de 2,15 a 3 metros. Cuando se tienen salas de estar grandes, las piezas se pueden distribuir de forma que se creen “islas” separadas.  Por ejemplo, dos sofás en el centro y un grupo de sillas y mesas auxiliares en un extremo de la habitación para cerrar un grupo de conversación separado.

Dejar espacio para la circulación y el tráfico

Ninguna habitación podrá ser funcional si no cuenta con el espacio necesario para moverse de manera libre y cómoda. Por ejemplo, en una sala de estar estándar, la sugerencia es que exista un espacio de 90 cm mínimo para los pasillos de uso frecuente y de 30 a 45 cm entre los asientos y las mesas de café. 

Estos mismos principios se aplican a comedores, mínimo 90 cm entre cada borde de la mesa y la pared más cercana. Si el tráfico no pasa detrás de las sillas en un lado de la mesa, una opción podría ser dejar 60 cm libres. 

Sin importar cuál sea el caso, es fundamental trazar las rutas de tráfico y tener presente que la mayoría de las veces, menos es más.

Definir un punto focal

Los espacios tienden a diseñarse en torno a un objeto: ventana, chimenea, obra de arte o televisor. Una vez que se ha identificado ese punto focal, los muebles pueden organizarse como sea más conveniente. Esto puede significar distribuir los muebles de forma que se puedan aprovechar las increíbles vistas de una ventana fija; mantener la vista de una chimenea despejada o colocar todos los elementos de forma que se optimice la exposición a la luz natural. 

En cualquier caso, los muebles más grandes (sofá de salón o cama de dormitorio) deben estar orientados hacia el punto focal. Si el televisor es el protagonista de la habitación, la distancia mínima de visión entre el objeto y los asientos debe ser por lo menos dos veces el tamaño de la pantalla (medido en diagonal), mientras que la distancia máxima de visión debe ser mínimo tres veces el tamaño de la pantalla.

Flexibilidad y adaptabilidad

A medida que se incrementa la demanda de espacios adaptables, híbridos y multifuncionales, es importante considerar la disposición de los muebles en cuanto a flexibilidad se refiere. 

Los muebles modulares son una excelente alternativa, gracias a que se pueden reorganizar o reconfigurar fácilmente en términos de forma y tamaño para adaptarse a las necesidades cambiantes. 

Las particiones móviles y las puertas corredizas también pueden ser de gran ayuda para crear distintos ambientes en una misma habitación, aportando versatilidad a un espacio rígido.

Equilibrio y variedad visual

En cualquier aspecto de la vida debe haber equilibrio, y la disposición de los muebles no es la excepción. Para lograr un diseño uniforme y equilibrado, se recomienda variar las formas, tamaños y texturas. Una alfombra es perfecta para anclar diferentes piezas de mobiliario y añadir textura adicional. Como regla general, debe centrarse alrededor de un acomodo de asientos con las patas delanteras de las piezas de mobiliario grandes colocados sobre ella. 

Existen diferentes formas de jugar con el contraste, ya sea combinando líneas rectas con curvas o emparejando sólidos con huecos. Algunas combinaciones que quedan muy bien incluyen: yuxtaponer muebles ortogonales con una mesa redonda, fusionar una silla de piernas largas con una mesa auxiliar sólida, entre otros.

Dale tu toque personal

Seguir todas estas pautas te será de gran utilidad para organizar tus muebles adecuadamente. Sin embargo, al final todo se reduce a la función de la habitación y, naturalmente, al gusto, estilo y preferencia de cada persona. 

Lo importante es asegurarse de cubrir las necesidades y estilo individual de quien habita el espacio, incluso si eso implica experimentar, desafiar los estándares convencionales y pensar fuera de la caja.

Ahora toma nota de estos puntos para que la organización de los muebles en tus espacios sea perfecta y se genere el ambiente que deseas para sentirte cómodo. Encuentra todo tipo de mobiliario para renovar tus espacios en la próxima Expo Mueble Internacional, del 14 al 17 de agosto del 2024.

Vía ArchDaily